Lollapalooza, Fórmula 1 y diseño de vanguardia impulsan un fin de semana histórico en la capital argentina, consolidándola como epicentro de eventos globales y motor económico.
Buenos Aires vibró con un fin de semana de récords turísticos, impulsado por eventos de talla mundial que inyectaron más de $24 mil millones a la economía local. Entre el 22 y 24 de marzo, 116.327 turistas nacionales e internacionales colmaron la ciudad, atraídos por la energía del Lollapalooza, la adrenalina de la Fórmula 1 y la creatividad de Ágatha Ruiz de la Prada.
El Observatorio Turístico del Entur reveló una ocupación hotelera del 74%, con un sorprendente 81% en hoteles de 5 estrellas, lo que refleja el atractivo de Buenos Aires para el turismo de alta gama. «Nuestro objetivo es claro: posicionar a Buenos Aires como la capital latinoamericana de eventos masivos», afirmó Valentín Díaz Gilligan, presidente del Entur. «Estos encuentros son mucho más que entretenimiento; son motores de desarrollo que generan empleo, dinamizan el comercio y proyectan a la ciudad al mundo».
El Lollapalooza Argentina atrajo a más de 300.000 personas al Hipódromo de San Isidro, mientras que la Usina del Arte se vistió de color con «Ágatha Ruiz de la Prada: 40 años de diseño y creatividad», una muestra que celebra el legado de la icónica diseñadora. La Fórmula 1 también rugió en La Rural, con una exhibición interactiva que promete ser un hito en Sudamérica.
Más allá de los grandes eventos, Buenos Aires seduce con su ecléctica oferta: 7.000 restaurantes, 287 teatros, 380 librerías y 150 museos. Desde cafés de especialidad hasta milongas clandestinas, la ciudad nunca deja de sorprender, ni siquiera a sus propios habitantes.