La industria del turismo se está transformando de forma significativa, adaptándose a las nuevas demandas de los viajeros. La pandemia de COVID-19 ha tenido un efecto profundo en el turismo a nivel global, provocando grandes pérdidas económicas y una lenta recuperación. La Organización Mundial del Turismo (OMT) estima que entre 2019 y 2022, el turismo perdió 2.6 mil millones de dólares por las limitaciones de viaje. El turismo internacional ha empezado a recuperarse, pero aún está un 34% por debajo de lo que era antes de la pandemia.
Esta nueva realidad ha presentado a la industria del turismo un desafío sin precedentes, pero también ha creado oportunidades para explorar perfiles de viajeros emergentes y una democratización del turismo. Mariana Carreón, Directora de Investigación Cultural y Estrategia en another, la agencia de comunicación estratégica líder en América Latina, destaca este cambio.
Reconfigurando el turismo en LATAM
El estudio «Updating the Boarding Pass» de another destaca cómo el turismo en América Latina ha evolucionado para ser más accesible y acorde con un estilo de vida digital.
Factores como el acceso a información en tiempo real, alojamientos alternativos, opciones de transporte más asequibles y un cambio en las preferencias de los turistas hacia experiencias sobre posesiones materiales, han democratizado el turismo en la región.
En 2022, el 86,3% del turismo en América Latina fue doméstico, impulsado por destinos de bajo costo, bellezas naturales y culturales únicas. Estos viajes regionales se traducen en un gasto del 84% en ocio y el 16% restante en trabajo. Las inversiones en turismo se centran en transporte, alimentación, alojamiento, compras, actividades y más.
De acuerdo con el análisis del equipo de another, el turismo vive una reconfiguración y reestructura. “Después de una pausa (obligada) alrededor de los viajes, se puede observar una reestructura mundial latente y las ganas de explorar como nunca antes. Las personas están dispuestas a invertir en experiencias de viaje que trascienden lo habitual especialmente aquellas que complazcan sus aspiraciones actuales como viajeros, impulsando el anhelo de descubrir y planificar en torno al entretenimiento, la cultura, la diversión, la sanación emocional y aventuras inolvidables”, dijo la experta. |
Nuevos perfiles de viajeros
El estudio de another destaca cinco nuevos perfiles de viajeros en la era post-COVID:
- Viajero Experiencial: Busca experiencias únicas y auténticas en destinos no convencionales. Se preocupa por apoyar a las comunidades locales y se sumerge en la cultura local.
- Viajero sin Culpa: Valora la relajación y la desconexión. Disfruta de la tranquilidad y de no tener una agenda apretada. Busca destinos paradisíacos y experiencias gastronómicas de lujo.
- Viajero Zen: Busca experiencias de viaje profundas para el crecimiento personal. Combina bienestar físico y mental, participando en retiros de yoga, meditación y explorando culturas locales.
- Nómadas Digitales: Trabaja de manera remota mientras explora el mundo. Busca conexiones humanas significativas en los lugares que visita y está interesado en la cultura local.
- Set Jetters: Se inspira en las tendencias culturales y en el entretenimiento mediático. Busca recrear en la vida real lo que ve en la pantalla y comparte sus experiencias en redes sociales.
La industria del turismo se enfrenta a una gran diversidad de perfiles de viajeros, con distintas necesidades y preferencias. Los especialistas en marketing y la industria turística tienen que adaptarse a estos cambios y seguir las tendencias emergentes. La satisfacción de estos viajeros depende de que se cumplan sus expectativas y deseos únicos, y de que se construyan relaciones sólidas con ellos.
El turismo en América Latina y en el mundo tiene un futuro emocionante y desafiante. Los viajeros quieren experiencias únicas y auténticas, no estándar. La industria del turismo tiene que evolucionar para responder a estas demandas y asegurar un futuro próspero.