Experiencia Blest Bariloche

Breve reseña histórica

Blest fue el primer emprendimiento cervecero de Bariloche y parte del comienzo de la experiencia cervecera de la Patagonia. Todo comenzó hace algo más de 28 años atrás, en un lugar llamado el Trébol de Colonia Suiza, donde Julio Migoya y Nicolás Silin junto a sus familias comenzaron a experimentar con la cerveza. Algunos años mas tarde se mudaron sobre Avenida Bustillo donde nace el primer Brew Pub de la Argentina.

Nuestra visita a Bariloche siempre incluye actividades en contacto con la naturaleza, comer rico, pasear por su centro cívico… y también descubrir nuevos lugares.

Ya se que dirán «Blest no es un lugar nuevo», pero la verdad es que si bien he tomado su cerveza en variadas ocasiones y admito que son de las más ricas que he probado, nunca antes había visitado este nuevo espacio al que se han mudado sobre Bustillo en el km 4 aproximadamente.

Siempre hay una primera vez, y hoy les voy a contar la nuestra….

Era viernes por la tarde… Feriado de Semana Santa. La ciudad estaba de festejos por una nueva edición de la multitudinaria Fiesta del Chocolate. El día era bastante gris y transcurría ese momento en que la tarde comienza a transformarse en noche y nosotros recién bajábamos de la confitería giratoria del Cerro Otto luego de un día de actividades allí arriba, pasamos con el auto por delante y nos tentamos: «Vamos a tomar una cervecita»… bueno dale!

Somos más fáciles que la tabla del 1, es cierto.

A primera vista uno se enamora del pequeño camión de la entrada, que data del 1929… lo primero que hice al estacionar y bajarme fue sacarle una foto.

El lugar es pintoresco, una barra larga con una estructura suspendida de donde salen las canillas desde donde ser sirven todos sus estilos y un reloj gigante con números romanos, que no funciona a parecer pero llama la atención.

Al costado de la barra, camino al baño se pueden ver, todos los barriles conectados al sistema central para servir la cerveza a la temperatura justa.

Por dentro el espacio es amplio, con grandes ventanales que dan la posibilidad de mirar hacia el lago Nahuel Huapi… La decoración tiene una mixtura típica de un bar cervecero con arquitectura de montaña.

La atención fue muy buena, enseguida nos trajeron la carta nos explicaron que estábamos dentro del horario del Happy Hour (2×1 de 18 a 20 hs) por lo tanto le entramos como «agua al Titanic».

Para comer y beber…

La carta de Blest presenta una propuesta de platos muy europeos que maridan perfectamente con sus cervezas. Entre ellos se destacan el Pot Pie (típico pastel irlandés), los Ñoquis Alemanes, chucrut a la cerveza negra con salchichas alemanas y el cerdo ahumado braseado, con chucrut y spätzle. Pero también podrán encontrar variedad de pizzas y tablas de picadas.

Como les conté, nosotros pasamos por la tarde luego de nuestra visita el Teleférico Cerro Otto, por lo tanto no hicimos una comida completa, aprovechamos para tomar unas cervezas y para no tener el estomago vacío las acompañamos con unas papas muy ricas que ven en la foto.

La carta de cervezas de Blest ofrece sus estilos: Pilsen, Bock, Frambuesa, Scotch Ale, Cream Stout, Hop Shot IPA y nos ofrecieron también una Sidra tirada de Barril muy rica. Como vieron en un par de fotos más arriba, todas sus variedades se sirven directo desde la chopera, en nuestro caso pedimos: Pilsen, Frambuesa, IPA y Sidra servidas en las clásicas pintas que nos vinieron acompañadas de maní con cáscara mientras esperábamos las papás.

En cuanto al precio, una pinta cuesta en promedio $80… y la porción de papas nos costó $140… lo normal en cualquier bar de este tipo. La relación calidad precio nos pareció buena.

Cómo llegar…

La cervecería tiene fácil acceso ya que se encuentra emplazada sobre una de las avenidas más pintorescas y principales de Bariloche como lo es la Av. Bustillo. Desde el centro se transita en sentido hacia el Llao Llao y a la altura del kilómetro 4 la encontrarán a mano izquiera. Desde el Llao Llao en sentido al centro y la encontarán a mano derecha.

Blest tiene amplio estacionamiento y si bien como les dije, me pareció que en el interior los ambientes eran grandes, la cantidad de gente que lo visita sobre todo en temporada alta o de fin de semana largo, hace que muchas veces si no llegas temprano, tengas que esperar a que se desocupe algún lugar. Pero podes esperar tomando algo, tampoco nada del otro mundo.

Para los que colección souvenirs, podrán encontrar un almacén de productos, donde se pueden comprar todos los productos de la marca Blest.

Hasta la próxima…

Bariloche es uno de los lugares que más productores de cerveza concentra, quizás el potencial de la zona, acompañados por el clima y la cercanía con el lúpulo, hacen que el destino se haya transformado en la cuna de la Cerveza Artesanal y es por eso que hay opciones para todos los gustos… sólo hay que dejarse llevar y disfrutar cada momento.

Nuestra experiencia fue muy agradable, el ambiente, la cerveza, la comida, la música, la atención… por supuesto que la recomiendo y si quieren ahorrarse unos pesos, aprovechen el Happy Hour.

Ya saben, en su próxima visita a Bariloche, aprovechen para disfrutar de una deliciosa cerveza artesanal acompañada por un rico plato típico…

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Hasta la próxima experiencia!

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