Sábado 10 de Marzo, 11 AM, el horario en que debíamos dejar el nuestro hotel en Rosario, para seguir nuestro viaje. Es que nuestro próximo destino sería en Villa María.
La idea era visitar a un amigo, Walter De Boever , archi-conocido como CheToba, un colega travel blogger de Argentina al que admiro y tuve la suerte de conocer personalmente hace unos años atrás en una Feria de Turismo. Ni bien le conté la idea del Road Trip nos dijo que si andábamos por la zona pasáramos, que en su casa teníamos alojamiento… cosa de viajeros. Y hasta acá llegamos. Nosotros le tomamos la palabra.
Salimos de Rosario cerca de las 16 hs, luego de dar un par de vueltas por lugares que nos habían quedado pendientes y llenar el tanque en una YPF, casi fuera del casco urbano de la ciudad. Es que siempre tenemos como premisa tener el tanque lo más lleno posible para estar preparados ante cualquier eventualidad.
¿Cómo llegar?
Llegar fue muy sencillo, en realidad la tecnología hace todo, cargamos en el mapa la dirección y el resto lo hizo en navegador. La distancia se nos separaba de nuestro próximo destino era de 260 kilómetros aproximadamente, por lo que calculábamos en 3 horas, y no le erramos.
Desde Rosario se toma por Autopista Rosario-Córdoba y luego de pasar Bell Ville, al llegar al cruce con RP 2, hay que bajar, tomar la ruta hacia la izquierda y en menos de lo que canta un gallo, el GPS nos indicó que estábamos en la puerta de los CheToba.
Un dato útil, pagamos un peaje de $45.
Llegamos a casa
Esa fue la sensación, llegar a casa. Créanme que no es fácil llegar a un lugar donde no te conocen más que por comentarios, y a esta altura esperábamos que hayan sido buenos, jajaja. Sólo nos conocíamos con Toba, de hecho, yo era el que lo conocía porque Vicky solo de fotos que le había mostrado de sus viajes en familia.
Pero el recibimiento fue como si nos conocieran de muchos viajes y es lo mágico de viajar, de salir a la ruta, de entablar relaciones, de entender que por lo general, una mano lava la otra y las dos lavan la cara.
Una familia viajera
Seguímos sumando kilómetros en ruta, en este Road Trip viajando por Argentina. Finalmente, luego de recorrer 2267 kilómetros desde nuestro punto de partida, llegamos a Villa Nueva a las 18.45 hs.
Los CheToba tienen basta experiencia en esto de recibir a viajeros de todas partes del mundo, ya que entienden mejor que nadie lo que es salir a la ruta, buscar la forma de ahorrar un mango y sobre todo, la necesidad de compartir… es que allá por Noviembre del 2011, decidieron emprender una gran aventura, la de viajar en camioneta desde Villa Nueva, su casa en Córdoba (Argentina) hasta San Francisco (Estadios Unidos) con la mera intención de visitar las oficinas de Google y poder hablar con sus capos sobre un proyecto que tenían en mente. No los recibieron pero eso es arena de otro costal.
Bueno, seguramente esa era una de las razones pero definitivamente no la única. La vida suele ponerte a prueba y están quienes bajan los brazos y quienes los utilizan para seguir adelante. Toba es de los últimos, el te rema en un tarro de dulce de leche.
Aquel viaje llevó a su compañera Marcela -cariñosamente Machy-, y los pequeños Sofia y Toto a vivir una experiencia que sin dudas cambio sus vidas. Hoy son referentes y palabra autorizada para hablar de viajar en familia (ya entraremos más en profundidad en este tema en otro artículo).
La cosa es que llegamos, y si bien el viaje no fue largo, como hemos contado en otros artículos anteriores, Ema necesita llegar, adaptarse un rato al lugar y descansar. Mientras tanto nosotros aprovechamos, mate de por medio, para charlar un rato.
Asado y vino tinto
La tarde se transformó en noche, de a poco las nubes fueron cubriendo lo poco de celeste que quedaba en el cielo, el viento comenzó a soplar con un poco más de intensidad, se respiraba ese aroma a humedad que anticipa una tormenta. Pero nada iba a impedir que salgamos a limpiar el chulengo para ir prendiendo el fueguito.
Costó un poco pero logramos mantener el fuego a pesar de la lluvia, que como verán son fotos con el celular porque no quise sacar la cámara.
El asadito salio de primera, lo acompañamos con un rico Malbec de Finca La Linda y el resto son anécdotas.
A dormir se ha dicho
Panza llena, corazón contento y a dormir. Fue un día movido, estábamos algo cansados, además uno tiene que entender que está en una casa de familia, que si bien lo reciben con los brazos abiertos, tienen un ritmo de vida que uno no puede alterar y debe adaptarse a sus horarios y costumbres.
Cuándo hablamos con CheToba nos planteo la posibilidad de dormir en su motorhome y nos pareció una idea fantástica porque sabemos que Ema se despierta muchas veces en la noche y la idea era como les dije, no molestar a nadie, que todo siguiera su curso lo más normal posible.
Entonces nuestra habitación por las próximas tres noches sería un furgón IVECO transformado en un motorhome. Con una amplia cama donde dormíamos cómodamente los tres, heladera, un baño químico… en fin, totalmente equipada para salir a la ruta.
Para nosotros… una linda experiencia. Ahora sí, a dormir, mañana hay que salir a recorrer Villa María y sus alrededores, pero sobre eso les escribiremos en los próximos artículos.
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Hasta la próxima viajeros!
@ViajoConVos
Así da gusto! He conocido mucha gente en mis viajes y las redes sociales nos mantienen conectados!
Las redes sociales nos acercan mucho, o nos mantienen cerca. Gracias por pasar Carla.
Un groso Toba! Sigo su blog hace mucho. Felicidades para ambas familias
Gracias Cristian. Abrazo grande.
Había visto el video pero no el post, un lujo y un gusto haberlos recibido. Ayer tuvimos la visita del Capitán Macu, creo que hablamos de él entre mates y mates, venía bajando pero ésta vez en Moto de Río de Janeiro hacia el sur, sin dudas un grande entre los grandes, unos 17 cruces del atlántico a Vela que yo le he contado y él ni se calienta en registrarlos. En cualquier momento le saco las ruedas a la IVECO y las vendo para hacerle mejoras al hotel jajajaja
Jajaja. Si esa IVECO hablará… Que grande, no paran de recibir viajeros. Un placer para nosotros haber compartido esos días con ustedes. Ojalá se repita ahí o en cualquier parte del globo terraqueo. Saludos a la flia.